Quijote y Sancho salen quebrantados anímicamente. Sancho se muestra pesimista por los últimos acontecimientos y cobarde
e interesado; mostrando indiferencia hacia lo
sucedido, empieza a acostumbrarse a las derrotas. Don Quijote,
por el contrario, se muestra luchador y ve esto como un
simple golpe de mala suerte. lo que supone que vendrán tiempos mejores, además
achaca este infortunio a que era gente ruin y baja, por lo que él no debería de
haberse metido. Así, uno desanimado pero casi acostumbrado y el otro convencido
de que es sólo mala suerte, continuarán su camino.
REFLEXIÓN: No debemos abandonar las luchas ante ciertas dificultades, seamos como don quijote que siempre buscaba lo positivo.